Saturday, April 13, 2013

Fisting: "El acto de meter el puño" - Parte 2


ACTIVO 
ya has metido tu puño dentro por primera vez, ¿lo has disfrutado? ¿No es cierto que has sentido cosas con tu mano que no habías sentido antes, suaves y cálidas? Así que ya has mirado a tu pasivo para ver cómo estaba reaccionando. ¿Ha sido un proceso intenso o el pasivo te ha pedido que quiere parar y has sacado la mano MUY LENTAMENTE?

PASIVO 
si ha sido tu primera vez y has conseguido que te entrara la mano, ¿lo has disfrutado? Quizá has sentido algo de dolor, ¿pero era dolor? ¿O es que has flipado con la sensación de tener el culo lleno? Dura, fuerte o a veces suave, la sensación depende del tamaño de la mano o de su forma. No sólo cada culo es diferente, también las manos tienen diferente forma y tamaño. AHORA depende de ti el tiempo que quieras tener el puño dentro, pero no sientas reparo en pedirle que lo saque. El activo sacará la mano lentamente.

Ahora hemos descansado, bebido algo, fumado un cigarro o incluso hablado sobre ello... así que empecemos de nuevo...
Por supuesto, sólo si tienes ganas (sonrisa)...




Cada fister (activo en el fisting) desarrolla con el tiempo su propia técnica o estilo de juego. Lo más importante es que haga lo que sienta que debe hacer de forma segura y natural, y poner una delicada atención a la respuesta del fistee (pasivo en el fisting). Así que volvamos a lo que os he explicado en la primera parte. Si no ha sido como esperabas o el pasivo ha tenido muchas dificultades para relajarse, dejadme deciros que hay 2 técnicas para el momento de entrada: el giro y la presión recta. Algunos responden mejor a una que a la otra, mientras que otros requieren una combinación de las dos.

Giro: Trabaja lentamente la mano contra la resistencia del agujero, rotándola 1/8 o 1/4 de vuelta. Mientras empujas hacia adentro del agujero, incrementando la presión, gira ligeramente la mano. Normalmente, el ano se abre lentamente y es capaz de albergar más que una mano.

Presión recta: Pon tu mano firme y aplica una presión cada vez mayor al agujero. Tu compañero seguramente te pedirá que aflojes en algún momento. Relaja la presión sobre el agujero, pero no necesariamente deberás tirar la mano hacia atrás. Cuando él esté listo, vuelve a incrementar la presión cuidadosamente.

La delicadeza y la paciencia son claves bien conocidas para este paso, pon atención a las señales que el pasivo te vaya dando, así como las señales que recibas del culo. Sigue la curvatura natural del túnel anal.

Puedes menear lentamente los dedos para abrir mientras el culo se relaja, pero evita en todo momento movimientos bruscos. POR FAVOR, PASIVOS, POR VUESTRO PROPIO BIEN, NO HAGÁIS MOVIMIENTOS BRUSCOS O SALTOS ESTÚPIDOS. NUNCA SAQUÉIS LA MANO DE VUESTRO COMPAÑERO EN UN SOLO MOVIMIENTO.

Ya volvemos a estar dentro, algunas veces en los últimos minutos el ano empuja la mano hacia adentro. Esto es normal, sobre todo lo hace el pasivo cuando vas más rápido. Así que resulta que ahora su culo se ha vuelto glotón, pero ellos no lo saben. Cuando tu mano está dentro es el momento para que el pasivo relaje la presión y sienta un torrente de éxtasis debido al paso de la mano. Es una experiencia altamente excitante, sobretodo para los novatos.

Una vez tu mano vuelva adentro, mantenla firme. Toma aire varias veces mientras observas a tu compañero. Si parece estar en otro mundo, haz una pequeña pausa antes de moverte otra vez. Recuerda que en este punto, el más pequeño movimiento de tu mano representa una gran vuelta para él. Dentro del culo es mucho más intenso de lo que crees.
Anima a tu compañero a que respire profundamente. Conseguirlo podría llevarle de unos pocos segundos a minutos. Después sigue despacio, permite que tu compañero dirija la acción. A veces podrías sentir una curva o pared rectal. Deja que tus dedos te guíen, y adopta la posición de pelota. Hay 2 esfínteres y lo sabrás cuando pases los dos y el ano se cierre alrededor de tu muñeca. Si esto no ocurre y lo sientes o lo ves en la reacción del fistee, vuelve atrás un poco y empuja de nuevo. Ten presente la cantidad de lubricante. Debes ir añadiendo lubricante o Crisco a tu mano, a tu muñeca y al culo de tu compañero o dentro de él a medida que vas entrando. Si el fistee es nuevo en el fisting, la sensación de la mano deslizándose hacia adentro y el descanso sobre la muñeca insertada serán muy intensos. Como activo, tienes la responsabilidad de ir con cuidado y sin prisas, así que realiza movimientos mínimos y habla a tu fistee. Si tienes dudas, baja el ritmo. Siempre puedes preguntarle al fistee y él te pedirá ir más rápido o más despacio. Para ambos o para uno de los dos esto puede ser nuevo y no estar acostumbrados a abrir o ser abiertos. Yo siempre respiro al mismo ritmo que mi fistee o a veces le marco la velocidad de respiración. Esto restablece el contacto y la confianza con el fistee y lo relajará. El contacto visual sigue siendo el más importante.
¡Aún queremos continuar y nuestra mano está dentro en posición de pelota! Ahora podemos hacer los movimientos de girar, menear, boxear/el émbolo, y bomba/fuelle: 


  • El giro consiste en rotar el puño en forma circular -LENTAMENTE- de manera que el ano friccione contra el puño y el recto contra el bulto cambiante del puño. Si el fistee es experimentado, podremos acelerar este proceso.
  • El meneo es producido por una vibración rápida del Puño; el puño no se mueve, sólo vibra. Puedes también darte golpecitos en el antebrazo (cuya mano esté dentro) con el puño poco apretado de la otra mano; el resultado de esto serán vibraciones que se transmitirán al interior del culo de tu compañero.
  • Boxear o el émbolo implica mover el puño dentro y fuera del recto como si lo folláramos; los fistees experimentados a menudo disfrutan teniendo el puño completamente fuera y luego dentro de nuevo. Por favor, haced esto sólo con aquellos que estén acostumbrados o en el momento en que notéis que el culo está suficientemente abierto.
  • La bomba o fuelle consiste en abrir y cerrar el puño ligeramente para incrementar la sensación del bulto.


Por favor, con todos estos movimientos sed cuidadosos y moderados.

Quedémonos un momento con el giro. La mano hace pequeñas rotaciones de ¼ o 1/8 de vuelta y, si el fistee es experimentado, se puede llegar a la media vuelta o más, pero mira a tu pasivo y él te dirá con sus ojos si le gusta. Las palabras no suelen ser buena señal. Aunque hay tíos que tienen que hablar, incluso hablan mucho, otros se ponen a reír (de todas maneras, si gritan no es bueno).

Los PASIVOS no deben decir estupideces, ya que podrían cortarle el rollo al ACTIVO (He estado con tíos que empiezan a explicar su vida. ¿A quién COÑO le importa eso cuando estás fisteando a un tío? Incluso hay cosas peores que pueden llegar a decir durante el acto.)

ASÍ QUE A PARTIR DE AHORA TENEDLO CLARO: SI ESTAMOS FISTEANDO, CENTRAROS EN EL ACTO. 
OTRA SITUACIÓN INCÓMODA PARA EL ACTIVO ES CUANDO EL PASIVO NO SE RELAJA PERO EMPIEZA A DAR ÓRDENES. Y no me refiero a que pida bajar el ritmo o ir más despacio o que diga que le duele. ¡¡¡Sino a cuando empieza a decirte paso a paso lo que debes hacer!!!

DE ACUERDO, esto me vuelve loco, y en 30 años de experiencia he aprendido exactamente que lo que quiere decir es que el pasivo no está en absoluto preparado. Incluso algunos de ellos llevan años fisteando. Son maniáticos del control, y cuando quieren entregarse al activo no pueden. Son aquellos pasivos que quieren ser fisteados para tener algo dentro de su culo. Ya sé que algunos de vosotros os estaréis cabreando ahora. Pero pensadlo: el fisting consiste en dar al activo el control total de tu cuerpo (y alma). Así que si queréis controlarlo todo, hay algo que falla en esta historia. Puede ser que sólo queráis tener un consolador más grande en vuestro culo, pero no podéis permitiros comprar uno o no os dejan llevarlo a los clubs. O aún peor, simplemente es que creéis que mola ser parte de la comunidad fistera.
Así que igual es momento para que estos pasivos se lo replanteen o aprendan a relajarse para que las dos partes puedan pasarlo realmente bien.
Si mientras estamos girando la mano notamos más espacio del que creíamos, probad de abrir un dedo o dos. ¡Abridlos sólo un poco! Con este o estos dedos probaremos de tocar la parte más interna, de derecha a izquierda... ¡observad si el pasivo piensa que es agradable!
Ahora poned la mano de manera que los dedos estén en la parte de arriba o en la de abajo.

Con la mano colocada con los dedos hacia abajo podéis tocar con los dedos lo que llamamos el suelo o músculos pélvicos, con lo cual provocaremos un cosquilleo en el pasivo y le proporcionaremos una sensación de relax.

Con la palma hacia arriba, los dedos están un poco abiertos. Cuando toques aquí sentirás el esfínter interno; el cuerpo reaccionará a eso y en algunos casos incluso provocará que tu pareja dé alguna sacudida. Algunos pasivos se mueven tanto que incluso no pueden evitar que sus piernas se muevan; en otros será sólo la parte inferior del tronco. Esto sólo ocurre si el pasivo tiene tal confianza en ti que está totalmente relajado. En un nivel un poco superior, podremos llegar a tocar la vesícula seminal, la próstata o la vejiga urinaria. Esto es diferente en cada tío, depende de cómo esté formado. Encontrarás que, según lo que toques, el pasivo te dirá o reaccionará, sobre todo en el caso de que le toques la vejiga o la próstata. Con pequeños movimientos que le hagas (p.e. dando golpecitos con los dedos), la vejiga o la próstata reaccionarán dándole ganas de mear. El pasivo que no esté relajado o no conozca esta sensación dirá o gritará ¡PARA! ¡Tengo que mear! No es verdad, sólo estás jugando con ello. Ahora, algunos de ellos querrán realmente que pares en este momento. Mira sus ojos. Si se han vuelto amarillos/verdes o la felicidad ha huido de su mirada, déjales ir al baño. Otros lo dicen, pero si en el momento en que paras un segundo ya no tienen ganas, vuélvelo a intentar. Si se mean mientras les estás fisteando (por esto es importante tener una toalla o una sábana de látex debajo tuyo) quiere decir que has hecho un buen trabajo. AHORA el pasivo está totalmente relajado y disfrutando de lo que le estás haciendo. Déjalo que mee. Será mucho o poco, pero deja que siga, al fin y al cabo lo que está haciendo es por tu culpa (sonrisa).

Si está totalmente relajado y confía en ti, haz esto varias veces, haz un pequeño movimiento circular y juega con tus dedos. Puede ser que en algún momento notes algo más pequeño, esto es la vesícula seminal. Juega con ella. Verás una sonrisa en la cara de tu compañero; esto también te hará sonreír a ti. Si va todo bien, tu compañero se correrá. Sí. Cada uno tiene una formación diferente, recuerda. Esto también podría ocurrir mientras fisteas con gran excitación o si en algún momento tocas la vesícula seminal y...
¡él se correrá!

Ahora puedes hacer estos movimientos con la otra mano, mientras una mano esté dentro, con los dedos hacia arriba o hacia abajo. Si el ano está suficientemente abierto, prueba de meter un dedo de la otra mano dentro también. Acuérdate de mirar cómo está reaccionando el pasivo, si aún sonríe y se lo está pasando bien. Con el dedo que acabas de meter, intenta llegar al suelo pélvico o, si está en la parte superior, la vejiga, la próstata o la vesícula seminal. Comprueba que a él le guste.

Después de repetir algunas de estas acciones, hemos aprendido que quizá es momento de tomar un descanso. El pasivo estará cansado o tendrá sed. Sí, sed; él ha gastado mucha energía también. También para ti como Activo seguramente notarás que la parte superior de tu brazo y tu hombro se habrán cansado o que tu mano se ha adormecido. Así que lentamente sacaremos el dedo y/o la mano.

Como cortesía, cogeremos papel higiénico y limpiaremos la zona alrededor del ano, y ayudaremos al fistee a bajar las piernas. Id con cuidado porque se podría marear (reacción normal, acaba de recibir, recuerda), abrázalo hasta que estés seguro de que reacciona bien, bésalo. Le ayudará a recobrarse.

Id a beber, fumar o comer (dulces). La próxima vez, más...


(Un agradecimiento especial a Sergi por la traducción / Special thanks to Sergi for the translation.)

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